domingo, 30 de agosto de 2009

Chile – 29 de Agosto


Chile recibiría dos KC-135E de EEUU y busca adquirir dos C-130

Santiago de Chile - La Fuerza Aérea de Chile (FACh) continúa con sus programas de modernización y la mejora de sus capacidades de proyección estratégica y negocio adquirir dos aviones de apoyo estratégico KC-135E y otros dos de transporte C-130, según afirmaron fuentes solventes.

Los dos KC-135E, con capacidad para reabastecimiento en vuelo y transporte a largas distancias, serían adquiridos a Estados Unidos cuya Fuerza Aérea ha desactivado esta flota el mayo pasado, informó el blog especializado Enfoque Aeronáutico.

Las fuentes no especificaron el montante económico de la operación.

Las negociaciones para la adquisición de los KC-135E se reabrieron el año pasado como respuesta a la demanda de la FACh de contar con aviones capaces, entre otras cosas, de facilitar reabastecimiento en vuelo a sus cazas F-16.

Según Enfoque Estratégico, el primero de los dos KC-135E, con capacidades de transporte de largo alcance y de cisterna para reabastecer de combustible en vuelo mediante el sistema de boom o lanza, podría ser recibido en octubre próximo.

Por otra parte, la FACh también esta en negociaciones con varios países - entre ellos Noruega, Estados Unidos y Gran Bretaña- para la adquisición de otros dos aviones de transporte C-130 Hércules que se unan a las dos unidades que ya tiene en servicio.

Estos dos aparatos en uso fueron comprados en la década de los setenta y están en la actualidad siendo sometidos a un repaso completo y modernización de aviónica en las instalaciones de la Empresa Nacional de Aeronáutica (ENAER) en Santiago.

Asimismo, estudia la posible adquisición de dos sistemas de defensa aérea SPADA 2000 Plus del consorcio europeo MBDA. El sistema estaría dotado de misiles Aspide de la italiana Finmeccanica/Alenia y radares Giraffe 3D de la sueca Saab.

Una larga historia

La Fuerza Aérea de Chille lleva más de una década buscando dos aviones para los que los militares chilenos denominan apoyo estratégico -aviones de porte y gran alcance para traslado de carga, personal y reabastecimiento de otras aeronaves en vuelo- sin que hasta el momento hayan encontrado una solución satisfactoria.

Según una cronología del programa escrita por los expertos chilenos Macarena López y José Higuera, el inicio del asunto se produce durante el extenso proceso de evaluación y selección que culminó en el año 2002 con la adquisición de una partida de diez cazas F-16C/D Block 50. La FACh puso un gran acento en la necesidad de que los nuevos aparatos estuviesen dotados de sistemas para recibir reaprovisionamiento de combustible en vuelo, para extender su alcance y autonomía.

Se dijo entonces que el contrato final incluiría la transferencia a Chile de dos aviones cisternas, dotados de los sistemas de transferencia de combustible. Pero eso no ocurrió y el requerimiento quedó pendiente, mientras la FACh seguía operando al "Águila", un viejo Boeing 707 ex Lan Chile modificado con asistencia israelí, que es el único transporte de largo alcance y avión cisterna de esta fuerza.

En 2004, Boeing ofreció dos KC-135E que serían dados de baja por la Fuerza Aérea de EEUU y actualizados por el fabricante estadounidense. Sin embargo, las conversaciones concluyeron sin éxito a principios de 2007 al llegar a la conclusión de que sería muy costo modernizar y mantenerlos y muy corta su vida útil.

A pesar de ello, hay constancia de que el Pentágono solicitó la oportuna aprobación al Congreso para la posible transferencia de esos aviones y el Senado norteamericano dio su visto bueno preliminar en noviembre de 2006 por un valor cercano a los 14 millones de euros, sin incluir los trabajos de modernización posteriores.


La opción de EADS-CASA



Descartando el KC-135E, la FACh comenzó a estudiar una oferta de aviones y fue entonces cuando el fabricante español EADS-CASA propuso una nueva alternativa, el A-310 MRTT, que estaba siendo desarrollado para varios países europeos como Reino Unido y Alemania y considerado por Estados Unidos.

La FACh oficializó un acuerdo con EADS-CASA, bajo el cual la empresa europea proveería dos A-310 modificados y equipados a un estándar MRTT ajustado a los requerimientos técnicos chilenos. El acuerdo preveía la entrega de un primer aparato en configuración comercial básica en diciembre del 2007, mientras que el segundo avión -modificado para transportar de personal y carga, y dotado con los sistemas de transferencia de combustible en vuelo- sería entregado hacia mediados del 2008.

Sin embargo, los problemas comenzaron cuando la compra de los dos A-310 seleccionados por EADS-CASA, que eran propiedad de la aerolínea estatal rumana TAROM, se complicó debido al ingreso de dicho país a la Unión Europea. Las reglas de la UE para la enajenación de bienes fiscales exigen una venta mediante licitación pública, lo que implicaba una larga espera sin garantía de obtener las aeronaves.

Según López e Higuera, descartada la alternativa rumana, surgió la posibilidad de adquirir dos A-310 puestos en venta en Frankfurt por la empresa de logística DHL.

Una inspección realizada por EADS-CASA dejó la impresión de que los aviones estaban en buenas condiciones, salvo la necesidad de adquirir motores, gasto adicional que sería compensado por menores costos de mantenimiento. Sin embargo, para mayor seguridad, la empresa española contrató una revisión profunda por Lutfhansa Technik y ésta mostró que, bajo impecables capas de pintura, los aviones tenían componentes estructurales afectados por importantes grados de corrosión.

A pesar de ello, los ejecutivos de EADS intentaron presentar una actitud de normalidad y con motivo de la celebración de FIDAE 2008 llevó a Santiago un A-330 MRTT de la Luftwaffe alemana que fue visitado por la propia presidenta Michelle Bachelet y las máximas autoridades militares chilenas.

Cancelación con EADS-CASA

Sin embargo ante la acumulación de retrasos y la falta de soluciones, la FACh decidió no esperar más y en agosto pasado canceló el acuerdo alcanzando por EADS-CASA a pesar de que los ejecutivos españoles afirmaban haber encontrado los A-310 adecuados, explicaron López e Huguera, quienes aseguraron que poco después las autoridades militares chilenas recibieron una oferta de la empresa Promin S. A. de Santiago proponiendo dos Boeing 767 de segunda mano, para podrían ser adquiridos a un valor inferior a 40 millones de dólares.

De acuerdo a fuentes en Santiago citadas por Enfoque Estratégico, Promin S.A. estaría actuando en representación del broker estadounidense Zeeland Aviation Corp., que dispone de dos Boeing 767-200ER -con matriculas G-BYAA y G-BYAB del Reino Unido- que volaban hasta hace pocos meses con el operador anglo-alemán de turismo y vuelos charter Thmoson.

Los aviones, explicaron las fuentes, serían entregados "tal como están", en configuración original de aerolínea. Esto significa que los costos del overhaul o refacción, más los de modificación y equipamiento de los aparatos para transporte y transferencia de combustible en vuelo deberán agregarse.


Fuente y foto: www.infodefensa.com